A la hora de llevar a cabo el alquiler de andamios europeos en Sevilla o
el alquiler de andamios europeos en Cádiz, por ejemplo, se hace necesario
firmar el correspondiente contrato. Y es que esta es la manera de que queden
claras y fijadas las condiciones de la operación, por ejemplo, en materia de
seguros.
En este caso, lo habitual es que en el pertinente contrato queden
establecidos aspectos tales como los siguientes:
- El arrendatario será el responsable del mantenimiento y conservación de los andamios.
- El arrendador se compromete a ceder el uso y disfrute de esas estructuras en perfectas condiciones de funcionamiento.
- En caso de avería o anomalía en el andamio, el arrendador deberá sustituirlo de inmediato con la mayor diligencia posible.
- El dueño será el responsable de los daños a terceros que se ocasionen por la actividad dentro del recinto cerrado donde se efectúen las obras y solo por fallos mecánicos. En los demás casos, como negligencia, imprudencia o mala fe, el arrendatario será el responsable.